El talento que va floreciendo
Joan Ruiz, Marian Sánchez Carniglia, Razvan Radulescu e Isabelle Fauvel en la Residencia el mes de mayo
De izquierda a derecha y de arriba abajo: Anna Solanas, Marc Riba, Isabelle Fauvel, Razvan Radulescu, Fernando Martínez (Burnin Percebes), Elena Molina, Diana Toucedo, Àngel Tolosa, Alba Cros, Mariona Claveria, Núria Campreciós, Joan Marc Voces y Laura Ferrés.
El penúltimo mes de Residencia ha sido crucial para los proyectos. Mayo empezaba digiriendo toda la actividad más de industria del mes anterior, y avanzaba por el camino de la preparación de los últimos capítulos del programa. Gracias a la colaboración que la Residencia tiene con Catalan Films, se organizó una sesión a cargo de Joan Ruiz, coordinador de la agencia de promoción del cine catalán, en términos de ampliar conocimientos sobre el mercado internacional, fundamentales para poder pensar en futuras estrategias de los proyectos. Se profundizó en las características de los diferentes espacios donde los proyectos pueden seguir desarrollándose, o los mercados a los que pueden viajar para posicionarse en el panorama europeo, así como festivales y circuitos donde mover las futuras películas.
Mayo es también el momento de prepararse más en profundidad de cara al sprint final. Y esto ha pasado de dos formas: se llevó a cabo una sesión sobre cómo presentar los proyectos frente a terceras personas, a cargo de Marian Sánchez Carniglia, curadora de proyectos. La idea de esta actividad es conocer de forma oral los puntos más destacados de los proyectos y autoras que los defienden, para detectar y tener en cuenta aquello a subrayar que resulte cautivador a la vez que esté en la línea de un buen storytelling. Lo importante es encontrar el propio estilo y la forma de transmitir las historias, que con cariño y cuidado se explican de manera irrepetible. A lo largo del programa se exponen los proyectos una y otra vez, pero poner foco de cara a la presentación final ayuda, al mismo tiempo, a acabar de definir lo que hace que cada uno de ellos sea único y brille.
Y la última semana del mes ha sido el momento del tan esperado retiro a Faberllull. Esta vez se planteaba una semana más intensa que nunca a cargo de Razvan Radulescu, guionista y consultor de guion rumano, e Isabelle Fauvel, consultora de desarrollo francesa. Ambos de dilatada experiencia, profesionalidad y sobrada amabilidad.
Durante una semana las residentes han compartido sus proyectos de diversas formas: en grupo, en grupo partido, de forma individual con los dos tutores, entre ellas... La propuesta de sesiones ha sido enriquecedora y variada, con una clara evolución en el trabajo desde el primer hasta el último día del retiro. Esta semana en Olot ha facilitado aquello en lo que creemos en la Residencia: estrechar lazos y relaciones entre el grupo, que tanto enriquece y que provoca que el proceso sea compartido y querido por las compañeras. Ayudar al resto te ayuda a ti misma y poder tener el espacio de concentración durante unos días es altamente gratificante a lo largo del proceso creativo.
Ha sido un privilegio poder trabajar una semana de forma intensiva entre el grupo y también con dos profesionales europeos con unas mentes brillantes que afinan en los puntos clave de cada proyecto y que ayudan a abrir caminos de encuentro entre las historias.
Aún queda un mes por digerir y reescribir, también con la ayuda de las mentorías individuales y de las últimas sesiones de cada proyecto con su respectiva tutora. Y así, poco a poco, es cómo va floreciendo el talento de la Residencia.